Muy pocas veces la tecnología va por delante de las necesidades de los usuarios, ya puede tardar un poco más de lo previsto la versión de SAP ERP sobre SAP HANA, aún hay muchos usuarios que no conciben la disruptiva tecnología que conlleva HANA: “¿Datos en memoria?”, “¿3.600 veces más rápido?”,… “¿para qué?”
SAP estima que habrá realizado las primera instalaciones de SAP ERP by HANA a fines del 2.013, una plataforma que permitirá a los usuarios hacer las mismas operaciones transaccionales de siempre, pero además, permitirá analizar la información y realizar búsquedas complejas en tiempo real y sin requerir de procesos de carga a un repositorio o base de datos especial.
Particularmente nos emociona imaginar todos los cambios que HANA puede implicar para los usuarios e implementadores, pero también comprendemos que algunos se “asusten” ante el alud de novedades que está trayendo. HANA implica hacer las cosas de otro modo, muchas tareas de instalación, mantenimiento y administración de la plataforma de sistemas, que actualmente se realizan, son innecesarias, lo que podría significar un gran ahorro de costes.
Cuando algo “asusta”, surge la negación con cuestiones tales como “¿para qué?”. Cuando valoremos HANA no deberíamos pensar en los procesos actuales, quizás en nuevos procesos o en otro modo de hacer las cosas.
No estamos de acuerdo con las afirmaciones que señalan que una determinada tecnología es una “ventaja competitiva”, porque comprendemos como “ventaja competitiva” algo único y muy difícil de igualar; y a pesar del monto de la inversión, cualquier tecnología es facilmente accesible. Lo importante es lo que se haga con ella y en el caso de HANA creemos que no es una ventaja competitiva, sino que puede contribuir, en gran medida, a la búsqueda constante de las ventajas competitivas que requiere innovar cualquier organización.
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